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16 octubre 2017

¿Qué es ser feliz? ¿Qué es la felicidad?


¿Qué es ser feliz? 

¿Qué es la felicidad?


Para ser felices


bloggueandomisideas con felicidad

"Creo que el propósito fundamental de nuestra vida es buscar la felicidad.
Tanto si se tienen creencias religiosas como si no, si se cree en tal o cual religión,
todos buscamos algo mejor en la vida. Así pues, creo que el movimiento
primordial de nuestra vida nos encamina en pos de la felicidad."
Dalai Lama

¿Cómo ser felices?

La palabra felicidad tiene su origen en el latín: felix-felicis, cuyo significado original es fértil (la que amamanta), fecundo. También, favorecido por los dioses. .
Es evidente que son muchos los autores de diversas disciplinas que han escrito y muchos otros los que continúan escribiendo acerca de este tema. Psicólogos, filósofos, neurocientíficos, religiosos, poetas han aportado valiosas definiciones al respecto.

La felicidad se puede definir como la forma expansiva en que una persona valora su existencia, valoración que le permite experienciar efectos placenteros tales como la alegría. Es un estado pleno de emociones positivas, de equilibrio con el medio ambiente social, de bienestar físico y mental. Es un estado continuo de realización personal que  permite evaluar la relación entre lo que se está siendo y lo que se aspira a llegar a ser; entre lo que se tiene y lo que se anhela llegar a tener. La satisfacción por los logros obtenidos le impulsa al objetivo de alcanzar los que aún se le resisten.

Los filósofos griegos y su concepto de felicidad.
Los cínicos equipararon la autosuficiencia (valerse por sí mismo sin depender de los demás) con la felicidad. No se regían por las convenciones de la sociedad, buscaban vivir libres de las reglas. Tal era su secreto de la sabiduría: dominarse a sí mismos y vivir de acuerdo a su propia naturaleza.
La autosuficiencia era también parte del pensamiento de los estoicos. En su caso tal autosuficiencia era valorada como la serenidad y el equilibrio para vivir en paz.
La felicidad era para los hedonistas el placer y, por supuesto, evitar el sufrimiento. Epicuro escribió que el placer es el principio y la culminación de una vida feliz.
Los eudaimonistas, entre ellos Aristóteles, afirmaban que la felicidad únicamente se logra por la realización personal, por la obtención de las metas individuales alcanzadas de acuerdo a la virtud excelente y un actuar permanente.

 “La felicidad sobreviene cuando lo que piensas, lo que dices y lo que haces está en armonía”
Gandhi

Generalmente se piensa que la felicidad es la emoción que se siente cuando se ha logrado realizar una meta. Desde nuestra visión de la realidad esto no es ser feliz, es estar felizAlcanzar un objetivo deseado produce un estado interno de alegría y satisfacción, una sensación subjetiva de bienestar que influye en la conducta de la persona. Tal estado, en sus diversos grados de manifestación, permite mantener una actitud positiva y tiende a mantener motivado al individuo para conseguir nuevas metas.

“Con frecuencia, algunos buscan la felicidad como 
se buscan las gafas cuando se tienen sobre la nariz”
Gustavo Dorz

¿Ser una persona feliz depende de las circunstancias externas? ¿De las metas alcanzadas?
Desde nuestra visión la respuesta a estas dos preguntas es un inevitable, aunque no siempre necesario, no. Ante las mismas circunstancias diferentes personas reaccionan de manera distinta. Depender de las circunstancias externas, generalmente fuera de nuestro control, genera en muchas personas emociones de ansiedad, de incertidumbre. Pensar que las metas realizadas siempre hacen feliz a un individuo es ignorar las condiciones psíquicas del mismo.

Algunos ejemplos para explicarnos mejor:
Cuando me gradúe en la universidad voy a ser feliz… pero después no consigo un empleo o me ofrecen un salario muy por debajo de mis expectativas.
Cuando me case seré feliz… pero el matrimonio puede resultar un asunto estresante en medio de los celos, el control, la intolerancia y los problemas económicos.
¡¡¡Ah!!! Pero cuando tengamos los niños si seremos felices…
Pensar que la felicidad depende de los logros es hipotecar la misma a un incierto futuro y a situaciones que posiblemente sobrepasan nuestras capacidades y aspiraciones.

“Nadie puede ser feliz si no se aprecia a sí mismo”
Jean-Jacques Rousseau 

¿Cuál es, entonces, nuestra respuesta?
Ser feliz es disfrutar este momento, este lugar; estos aquí y ahora que estamos viviendo y si la situación es adversa o hasta dolorosa… tener la certidumbre que podremos salir elegante y dignamente de la misma.
La felicidad, tu felicidad, ha de ser una actitud. Una actitud mantenida coherentemente cada instante de cada día. Ser feliz es una manera de ser, pensar, sentir y hacer. Estar feliz puede resultar en un estado tan breve que cuando se pierde lo que queda es tristeza, extrañeza, impotencia.
La felicidad es un estado de realización personal, individual: es sentir confianza en sí mismo, ser autónomos en nuestras decisiones y deseos; saber que tenemos la libertad de ser, saber, sentir. Atrevernos a soñar una mejor vida y estar conscientes que tenemos el derecho asertivo de realizar nuestros sueños. Comprender que podemos cometer errores (es otro derecho asertivo) y que podemos aprender de los mismos sin sentir culpa.
Nuestro deber con nosotros mismos es entrenarnos en la actitud de felicidad. Tal entrenamiento implica que, a pesar de circunstancias desfavorables, hemos de mantenernos optimistas, positivos, proactivos… felices. Para ser exitosos en este entrenamiento mental hemos de comprender que debemos involucrarnos con todo el ser que somos: con los sentimientos del corazón, con el intelecto del cerebro, con el espíritu humano que se dedica al progreso permanente.
Los aspectos desfavorables con relación a dicho entrenamiento mental están en la propia mente. La depresión, la iracundia, el pesimismo, la victimización entre otros impedimentos, bloquean la posibilidad de disfrutar la existencia. Una valiosa ayuda en dicho entrenamiento se haya en la consulta psicológica e igualmente con sesiones individuales de coaching con un profesional bien capacitado. 
  
“Uno se siente inclinado a pensar que la pretensión de que el hombre sea "feliz" no está incluida en el plan de la “Creación”. Este tipo de formación había llevado a muchos psiquiatras a la tremenda conclusión de que lo máximo que cabía esperar era la transformación de la desdicha histérica en la infelicidad común.” 
Sigmund Freud

Ser feliz (no simplemente estar feliz) requiere desarrollar habilidades psicológicas, adquirir destrezas funcionales, disponer de herramientas sociales que nos permitan sentirnos individuos sanos, productivos, realizados.
Para finalizar este post te invitamos a reflexionar serenamente, a discernir profundamente sobre nuestro tema de hoy y, si sientes que no eres feliz, preguntarte si estás haciendo lo apropiado para poder disfrutar a plenitud la maravillosa bendición que es existir.

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